Viernes 30 de junio La Presencia de Mar

       Hoy al levantarme por unos segundos he mirado al lado de la cama donde dormía Mar y me ha parecido sentir su presencia, me reconforta despertarme con su recuerdo.

      Con el paso de los dias idealizo quizá a Mar, solo recuerdo lo mejor de ella, se me olvida que las últimas semanas poco a poco habia ido perdiendo su chispa, se estaba yendo hacia la Luz y no lo veia, hasta unos dias antes soñaba, anhelaba un milagro, me gustaba tanto dormir junto a ella, sentirla moverse en la noche, verla desplazarse por el cuarto hacia el baño, estaba tan anamorado de ella, que hasta sus más ligeros pasos me encandilaban, se que tengo un trabajo pendiente de desapego, lo sé y estoy en ello.                                           

      Aún recuerdo cuando llegaba al cuarto después de la ducha envuelta en una gran toalla y como me gustaba verla secarse y vestirse, nos dabamos un abrazo y algún beso y nos poniamos en marcha. 

      Bajabamos a la terraza para recitar alguna oración juntos y luego preparabamos algo para desayunar, a veces me pedía que trajera alguna hoja de la huerta para un jugo verde y luego mientras desayunabamos a veces comentabamos algunas de sus lecturas, la vida de los pioneros en Nueva Zelanda por ejemplo, evitaba totalmente los temas polémicos, como los conflictos de género o la politica , quería comenzar el día de forma positiva.                          

      Cuando terminabamos el desayuno a veces subia al cuarto a seguir leyendo alguna novela histórica de la que estaba enganchada. A media mañana empezaba a preparar algo para comer,  una rica ensalada, unas hamburguesas de lenteja germinada al horno...también me recordaba que nos tocaba limpieza  y aseabamos juntos la habitación y el baño...ella tenia una forma de hacer estas tareas muy minuciosa, bicarbonato para el lavabo, bañera y váter, vinagre par el suelo...cambiabamos las sábanas y una vez limpia y pefumada  la habitación, daba gusto recostarse en la cama a leer, con la ventana abierta viendo el cielo desde el lecho.

     Cuanto me ayudaba su compañía, cuando había un conficto en la casa de convivencia, siempre lo hablaba con ella y me daba una perspectiva diferente, inclusiva, su sola presencia ya era sanadora, su mirada compasiva , su sonrisa...

      Me he apuntado a la formacion tántrica con Neo, espero que me ayude a integrar mejor mi sexualidad, mis afectos, mis duelos, voy casi sin espectativas, cada curso de Tantra para mi ha sido un nuevo descubrimiento, en la Buhosfera con Sana, en el Festival Luz del Sur con Tiara o Miguel o en UniOm con Neo, siempre me suceden acontecimientos soprendentes, en la sutileza de las mujeres y hombres tántricos descubro la Comunidad, me siento cómodo entre sus independencias entrelazadas.

Cantando Kirtan en el Festival Pachamama Spirit con Johnny de Molino de Guadalmesi